jueves, 16 de agosto de 2012

Que pase el tiempo...

Este verano viajero me ha llevado también a tierras extremeñas unos días. Reencuentro con mi amiga más apasionada y de camino conmigo misma, y es que los amigos, los de verdad, los que no juegan con tus emociones porque de verdad son lo que son y sienten lo que sienten...esos regalos del universo, aparecen en cualquier momento, generalmente cuando más falta te hacen (aunque no lo sepas) y te enseñan lo que han aprendido, comparten lo que han sufrido, te abrazan sin expectativa y se ríen de corazón y con él.
Como una no quiere parar de aprender, porque esa es la mejor manera de no envejecer y por tanto de estar viva, lleva los sentidos abiertos (es lo que tiene este ritmo tropical en el que vivo desde que soy sirena y ya no tengo velocidad punta) y se fija en la pura poesía en que a veces se convierte cualquier cosa dictada desde el alma. Y es que cuando menos lo esperas se te caen "los muros que evitaban la tristeza" y entra el sol, la lluvia, el llanto, la risa y te expones a vivir, así que mejor con un poquito de poesía, de belleza que endulce el camino por amargo que éste sea.
A lo que iba, me contaba mi amiga-cómplice una historia en la que el eje central era cómo ante el dolor emocional alguien deambulaba por una estancia pidiendo, a no se sabe quien, en voz alta "que pase el tiempo, que pase el tiempo, que pase el tiempo,..." hasta que un día dejó de doler y nunca se supo cómo ni porqué, sólo se supo que cuando pasó el tiempo se curó.
Desde ese día cuando me atasco en el dolor emocional (sí, siguen doliendo demasiadas cosas, ya me gustaría a mí estar curada pero aun no ha llegado ese momento) repito ese mantra, no me cura pero me sirve para tener la esperanza en que un día dejará de dolerme la herida sin que yo me de cuenta...mientras tanto floto y me entreno en piscinas para que cuando llegue al mar no me de miedo la inmensidad del vivir...
Os dejo esta canción de Cristina Lliso, no digo ná...¡pincha play!

3 comentarios:

  1. Sirena, cuanta vida te queda por descubrir en este inmenso mar de vida! ... y el tiempo sigue pasando, pasando, pasando... YA QUEDA UN DÍA MENOS!!
    Te quiero, amiga.

    ResponderEliminar
  2. Cacho beso, bonica, que todo lo que escribo no hace otra cosa que estropear el cómplice silencio.

    Isamar

    ResponderEliminar
  3. Me alegra tanto este auto reecuentro contigo misma que estás viviendo...
    Te quiero.
    Muak
    Mazes

    ResponderEliminar