martes, 10 de agosto de 2010

La limpieza


Desde que he vuelto de Almería me ha dado un súbito y repentino ataque limpiador. Ayer me tocó fregar, planchar y poner en orden lo cotidiano. Hoy la limpieza ha sido más profunda, flamencamente jonda diría yo, así que me he embarcado en la prodigiosa hazaña de ordenar los miles de papeles acumulados durante quince o veinte años en las estanterías de mi despacho. La mañana empezó meticulosa y mientras apilaba en un lado los que archivaría en el futuro, soltaba en una bolsa discretamente los que creía inservibles, todo eso mirándolos de reojo por si me lanzaban un reproche imperdonable...A medida que avanzaba la hora y el calor apretaba, la bolsa (o mejor dicho las bolsas, porque sumaron seis y bien grandes) se fue llenando de papeles que daban fe de mi paso por ciudades, cursos, programas y proyectos que me han ido dibujando y desdibujando durante todos estos años.
Mientras ojeaba páginas de materiales de cursos, evaluaciones, proyectos y memorias me inundaba un agradecimiento infinito por el tiempo que he dedicado a conocer pueblos, ciudades, hospitales, centros penitenciarios y gentes que me han enseñado mil formas de ser, de estar y de vivir...sin pretensiones. Tanta evocación me ha emocionado, pero eso sí, sin hacerme dudar de mi decisión de no seguir acumulando carpetas y recuerdos, y es que tengo que dejar espacio suficiente para que lleguen imágenes, ideas y personas nuevas...(a ser posible que se parezcan a las gentes de la canción de Vainica Doble que os invito a escuchar, y que Dejen vivir con alegría)

Junto a miles de sesudas páginas de variada índole profesional, se me han resbalado descuidadamente en la bolsa del olvido algunas cartas de amor pasadas de época, fotos dolorosamente bellas, promesas incumplidas, miles de poemas antiguos firmados por mi adolescente mano y algún que otro cuento pueril. Mientras el sol se cebaba en el rigor de la siesta, yo daba viajes al contenedor cargada con mi pasado y sudando como una posesa, pensando en que no era casual esta limpieza de recuerdos y es que de casual no tiene nada cuando la he hecho con toda la intención del mundo. No sólo trato con ella de dejar espacio libre en esta breve habitación (por ser generosa con ella en los adjetivos), sino más bien de abrirle las puertas a todo lo nuevo que deseo que empiece a llegar. Sí, ha sido un gesto, sólo un gesto de bienvenida a lo que venga, algo así como invitar al universo a un refresquito para que vea que ya tengo preparado el espacio para lo que por fin tengo claro que deseo.

Y no, no se trata de aprobar unas oposiciones, nada más lejos. Debo agradecer a mi último viaje que me haya dado la respuesta correcta a todas mis contradicciones y es que no quiero perderme en farragosos estudios durante años, cuando la vida me ha demostrado de sobra que ya sólo me apremia estar en acción en el aquí y en el ahora. Cada cual tiene su camino y ése de proyectar tan a largo plazo una estabilidad meritoria y digna del respeto ajeno, con todos los respetos: no es mi camino.

Aunque, si digo la verdad, la más profunda de mis reflexiones tiene que ver con la estantería semivacía reservada para mis libros, y me refiero exactamente a los que yo voy a escribir, es así como le pido al futuro que me regale años de salud para que me dé tiempo a llenarla.

7 comentarios:

  1. LO QUE DARÍA YO POR HABER ESTADO ECHANDO UN VISTAZO A TANTA EXPERIENCIA ACUMULADA. ¡Y YO TAN ORGULLOSA DE MI PORQUE TENGO UN CAJONCITO LLENO DE COSITAS QUE VOY HACIENDO!!! JEJEJEJE.MUCHO ANIMO PARA VOLVER A RELLENAR ESAS ESTANTERIAS. ESTOY SEGURA QUE TENDRAS QUE MUDARTE A UNA HABITACIO MAS GRANDE. UN BESAZO.

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  2. como recien llegado a este rinconcito de internet, te doy las gracias por la fluidez de tus palabras ordenadas con tan buen gusto que hacen que la lectura de tus historias sea ya de mis favoritas y espero con impaciencia ver pronto en las estanterías algo con tu firma en formato papel(que quema menos la vista que la pantalla del portatil)
    saludos y suerte para alcanzar tu sueño.

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  3. Mari Carmen algunas personas necesitamos miles de experiencias para aprender, mientras otras tenéis la fortuna de llevar la sabiduría implícita, ese es tu caso. Un beso
    Gracias leamsi, gracias de verdad, leerte me hace mucho bien, me reconcilia conmigo y eso no tiene precio. Un beso

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  4. hoy tengo que darte las gracias por tirar de mí aún sin saberlo. ha sido un día un poco bajo y leerte me ha serenado mucho.
    es cierto que muchos padecemos de diógenes emocional y nos apegamos a lo que ya no sólo no nos deja avanzar, sino que nos retiene, nos estanca en un punto del camino que empieza a desmoronarse.
    entonces únicamente poner un pie delante de otro es la solución
    gracias, gracias, gracias
    y un millón de besos

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  5. Estoy totalmente segura que va a ser así...el primero está en el aire, "esta noche me amanece" como su nombre indica está a punto para ver la luz de la mañana, mucha suerte amiga amada¡

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  6. Mazes me alegro de servirte de ayuda, tú me ayudas cada dos por tres!!!! Un beso
    Nanuk: Dios te oiga!!!! gracias por tu apoyo incondicional incluso cuando no me aguanto ni yo. Muuuuuuak

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